La democracia en El Salvador

La democracia en El Salvador, ¿Cuál democracia? ¿Democracia de quién y para quién? ¿Por qué la democracia?

Si su pensamiento inicial sobre la democracia se limita únicamente a “Votar” (Emitir el sufragio) entonces debe replantear su concepto al respecto, ya que debemos preguntarnos sí ¿vivimos en una democracia en El Salvador, o una consecuencia de democracia?, ¿un intento fallido de democracia? O ¿básicamente en un laboratorio social-regional?

«Nuestra democracia es escenificación nacional de hipocresía refinada, repleta de leyes ‘bonitas’, pero hechas siempre, en última instancia, por la élite dominante para que la sirva de principio a fin. Los políticos son gente que se caracteriza por ganar mucho, trabajar poco, hacer negocios, emplear a parientes y apaniguados, enriquecerse a costa de las arcas públicas y entrar en el mercado por arriba… Si ligásemos democracia con justicia social, nuestra democracia sería su propia negación» (p.330.333). -Pedro Demo, de Brasilia (2002).

La democracia es un negocio del poder contra el mismo poder. Se crean relaciones y recreaciones donde la democracia del rico prevalece sobre la pobre democracia del pobre. No es casual identificar que los grandes problemas sociales se generan en la clase pobre y las grandes crisis económicas en las clases ricas, entonces; ¿Dónde quedan las soluciones políticas de  la clase media?, en nuestro país la clase pobre va en crecimiento, la clase rica en estancamiento y la clase media en declive. 

  

En nuestra democracia tenemos políticos que son electos por personas que al poco tiempo se olvidan por quien votaron, y menos se les puede pedir o exigir cumplir las “promesas” o propuestas de campaña, y es más agravante reconocer nuestra pobreza material pero más aun nuestra pobreza política. La democracia tiene una base importante en la sociedad y otra en la política; ambas son la mesura que nuestro país necesita para salir de la penumbra. “Pobreza política es que el pobre no sepa las razones de su pobreza, y creer que los problemas de los pobres pueden ser resueltos sin los pobres, sólo por el asistencialismo estatal o por el clientelismo populista. Con esto se aborta el potencial movilizador del pueblo organizado que puede exigir cambios, temidos por la clase política, y reclamar políticas públicas que atiendan a sus demandas y derechos” Mauricio Iraheta-UCA.

¿Vivimos en democracia en El Salvador? No del todo, aún hay privilegios para las élites y poderosos del país. Al votar estamos reafirmando una decisión de alguien con más poder y cediendo nuestra soberanía como pueblo a ser gobernados y dirigido en nuestra sociedad, no somos iguales en una democracia por el hecho que unos cuantos gobiernan. 

Democracia es el Gobierno del pueblo, que esta palabra viene de las raíces demos: pueblo, y cratos: poder; es decir, el poder del pueblo. Esta descripción se contrasta con nuestra Constitución; Titulo III, Art. 83, “El Salvador es un Estado soberano. La soberanía reside en el pueblo, que la ejerce en forma prescrita y dentro de los límites de esta Constitución” y el Art 86, “El poder emana del pueblo”. En estos párrafos suena alentadora la “Democracia” en nuestro país, pero hemos pasado décadas de una democracia convulsionada desde los años 30, 60, 70, 80, 90 y recientemente en el nuevo siglo XXI.

En nombre de la “Democracia” en nuestro país se daban golpes de Estado, se derrocaban presidentes, se hacían guerras y conflictos, se hicieron genocidios y masacres, se perpetuaban dictaduras militares y modelos de feudalismo hasta nuestras épocas, se imponían candidatos y se obligaba al pueblo a limitarse simplemente a ratificar y o elegir a personas impuestas para gobernar, se asesinaban los líderes, se enjuiciaban, se atacaban los derechos del pueblo y se generaban todo tipo de crisis con tal de favorecer la democracia de las élites más poderosas, son esas élites los verdaderos dueños de El Salvador que han gobernado por más de 200 años ininterrumpidos y se ve contrastado en pleno año 2018  con la incursión de un nuevo poder: poder social.

 ¿Cuánto más debe incurrir para estabilizar la democracia en base a la transformación social? La democracia en nuestro país puede mejorar, y hay señales de ello en la garantía de libertades, derechos civiles y políticos, ejercicios de participación y elección, pero ¿podemos llevar nuestra paupérrima democracia a niveles de participación plena y justicia social?, Si, si podemos.

Me despido con este concepto básico:

Democracia: Sistema político que defiende la soberanía del pueblo y el derecho del pueblo a elegir y controlar a sus gobernantes.

Si quiere ampliar más sobre el tema dejo un link de una pagina que me gusto: http://www.filosofia.org/mon/democra.htm